Ecofiltro consta de múltiples componentes que trabajan en armonía para purificar el agua de forma eficaz. La unidad de filtración está construida a partir de un material compuesto que comprende tres elementos naturales: arcilla, aserrín y plata coloidal. Juntos, estos componentes ofrecen las siguientes funcionalidades:

• Arcilla : Dentro de la unidad de filtración, la arcilla forma canales microscópicos que capturan los contaminantes presentes en el agua, incluidos sólidos, bacterias y parásitos.

• Aserrín : A través del proceso de fabricación, el aserrín se transforma en carbón activado, eliminando cualquier olor, sabor y turbidez desagradable del agua.

• Plata coloidal : Aplicada a la superficie del filtro cerámico después de la cocción, la plata coloidal actúa como una capa protectora secundaria, neutralizando los contaminantes. Este bactericida ampliamente utilizado purifica el agua a nivel mundial sin efectos adversos. En las unidades Ecofiltro, utilizamos 0,22 litros de plata coloidal a 530 ppm para nuestro producto de 5 litros y 0,42 litros para nuestro producto de 20 litros, tanto aplicados interna como externamente. Los estudios muestran que inicialmente hay una mayor liberación de plata, alrededor de 40 ppb (0,04 ppm), lo que está muy por debajo del límite de ingesta diaria recomendado de aproximadamente 30 ppm. Según la USEPA (Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos), la ingesta máxima de plata no debe exceder los 5 μg por kilogramo de peso corporal por día (1996), lo que se traduce en una ingesta diaria de 350 μg para un adulto promedio de 70 kilogramos.

Inicialmente, el proceso de filtración puede ser lento debido a la apertura de los poros del material cerámico. Esto puede provocar un sabor a arcilla en el agua. Para un sabor óptimo, se recomienda desechar el agua de las filtraciones iniciales y vaciar el recipiente varias veces, evaluando periódicamente el sabor.